NOPOEMAS

Los fines de semana pasaba 12 horas en la cama mirando el mismo tipo de serie criminal en Netflix si ya las había visto todas entonces miraba las de Amazon Prime y cuando quería llorar me ponía alguna en Disney. Tenia otras 12 horas para pasármelas durmiendo, la depresión no me daba tiempo de comer y aun así estaba gorda. Si me aburría entre series leía artículos sobre cómo curar la ansiedad, como si existiera una terapia que me llevara milagrosamente al día en que todo empezó.

La depresión es una delgada línea por la que caminamos todos los días. Hace unos años iba por la vida con mucha tristeza, pensaba que el fracaso había llegado a mi vida y que debía estar agradecida porque quizás no venía nada más porque ya me iba. El fin de mis días.  

No encontraba trabajo y sufría. Un día recibí una llamada para empezar un lunes, Nelson sacó cinco minutos para ir a verme, me dijo que no era un trabajo sofisticado, que el tiempo era oro y el contrato se firma sin margen de error porque la responsabilidad era grande y su equipo el mejor.

Como me sobraba el pensamiento recurrente y además no me pongo vestido le dije que ese trabajo sí me servía. Viví con calidad y éxito, como él nos exigía. Ese trabajo me salvó la vida y con este nopoema firmo su eterna despedida. 

Sé tan feliz como puedas llegar a ser,

Que venga todo el éxito  que siempre soñaste tener,

Cumple muchos años más, todos los que quieras vivir

ten salud, felicidad y mucho amor 

Que sepas siempre que quien te quiera, 

nunca te querrá tanto como te quise yo.

Si te vuelvo a encontrar

en una vida o en la otra

será en ese lugar, entre aquí y allá

donde nunca nos tendremos

que volver a separar.

Para mi amigo en Londres

En su día especial

¡Feliz Cumpleaños!  

La ciudad no era lo que yo esperaba, una ciudad inmensa, horas de tráfico y lo peor no conocía a nadie. La primera vez que me robaron llegando a casa le dije a mi papá que había visto el mal de frente. Me sentaba muchas horas en los buses a imaginarme la vida de los otros para encontrar la bondad en la gente y así finalmente nunca más pensar en la muerte.

Fue el día en que me gradué, intenté ser abogada, no me gustó y entonces aposté por el periodismo. Todavía hoy me pregunto ¿de qué voy a vivir? como me preguntó mi papá: le respondí ¡de ti si me voy a vivir contigo! Veo los ojos llorosos de mi mamá cuando me subía a un bus intermunicipal directo para la capital.

La gente ya no se enamora. Las mañanas en un bus al trabajo son como todo en la vida. Llega la desilusión de haber estado 30 minutos de pie, al lado tuyo, creyendo que te irías como lo haces siempre y que al menos me dejarías la silla. Cuál fue mi sorpresa al darme cuenta que pase todo ese tiempo imaginándome tu vida, para que al final me bajara yo primero sin tu despedida.

El día que te gradúas debería incluir un mensaje adicional que diga "Bienvenida al sistema para la Igualdad, el Mérito y la Oportunidad". Sí, tú ¡DESEMPLEADA!

Me pongo a pensar en lo maravilloso que era llamar y colgar sin que nadie nunca supiera quién había sido.  Ahora me toca entrar a una página web y preguntarle al Tarot si debería o no decirle que siempre fui yo.

Trataba de explicarle a Trich por qué le regalo "El amor en los tiempos del cólera" a todas mis amigas. Le dije: -Siempre he creído que hay que tenerle miedo a una mujer enamorada y más si es inteligente. Trich: -Claro es que uno a los 23 está en modo Florentino Ariza, comiéndose al mundo. #LITERALMENTE

Son tiempos difíciles, la situación me hace pensar que Dios nos guarde en la felicidad de lo que tenemos, y nos evite la tristeza de quedarnos solos en este mundo cada vez menos solidario. La vida, sin duda, es dura. Pensemos que al menos en este largo camino, tenemos la oportunidad de encontrarnos con algunos corazones muy buenos.

La abuela se ha ido,

Eran las tres de la tarde cuando la vi por última vez, toque su pelo ya seco mientras se caía, entre en cólera por el agua que no había, las navidades y los abrazos que faltarían. Fue un adiós a sus ojos verdes que sufrían, besé su frente mientras me despedía, le dije quédate tranquila porque creí que no se iría.

Se despertaba y abría cien veces la misma conversación para encontrar nada, entendiendo que a veces el mensaje que más se quiere es el que nunca llega. Le daba igual, allí seguía mirando su teléfono y pensando todas las mañanas cuán insolente puede llegar a ser el destino que los puso a querer otros caminos.

Decir que uno no tiene nada nuevo que contar es mentira, es la solución más fácil para excluir al otro de los sentimientos que no quiere compartir. 

Hablar de nada es mejor que no hablar del todo

Había una entre un millón, la posibilidad de conocerte o aquella en donde te ibas sin siquiera verte, me he quedado con la opción de tenerte porque así es más fácil saber que quizás puedo perderte. No juego con la buena suerte porque puede que traiga consigo la posibilidad de quererte siempre.

Siempre salía a mirar el árbol que está en frente de mi casa, pensaba que si todavía tenía flores era porque ya vendría el verano. Nunca me gustó el sol y mucho menos las tierras calientes o muy húmedas, pero siempre me gustaron esos amores de verano que incluso nacen en pleno invierno.

Mi regalo es una metáfora desesperada para que no me olvides

El deseo de una mujer va más allá del aforo máximo de sueños por persona.

Era un jueves cuando lo vi. Lo imaginé por ahí, después de un tiempo lo besé, lo quise tanto que como siempre lo perdí, lo que él no supo fue que yo también me lo comí.

Fuimos dos extraños muy conocidos. Nos vimos sin vernos cuando todavía éramos niños, quisimos a muchos pero nos enamoramos de pocos, nos encontramos sin conocernos. Nos quedamos cortos de tiempo sin saber cuando volveríamos a vernos.

Ella es esto que llamamos amiga, pero amigas las hay de todas clases, ella fue esa, una en un millón, la que salió corriendo y dijo: - Vamos a tomarnos algo. Terminamos como todos en la misma esquina, con la misma gente. ¿Qué es lo especial que tiene Trich? Que también estaba con la vida encima pensando que no llegarían jamás los años. Nos emborrachamos.

Fueron meses, incluso años de un constante ir y venir de ideas, bien o mal intencionadas. No imaginaba aquella realidad del que nació para no hacer otra cosa más que vivir. Siempre creí que lo interesante de aquello era ser feliz, pero entonces también tenía que estudiar, trabajar, ganarme la vida. Fue ahí cuando empezó esta historia.